El valor añadido del ex deportista de élite en la empresa

Un ex deportista de élite en la empresa puede desempeñar un rol excelente. No son sólo los valores del deporte, sino el cómo se ha preparado en su trayectoria para llegar a lo más alto, las cualidades que aprende o las habilidades que desarrolla.

Tras toda una vida dedicada en cuerpo y alma al deporte de élite, ahora este deportista vive su particular reskilling laboral (no suele ser por necesidad, sino por pura y sencilla vocación) entrando en el mundo empresarial.

Las empresas deben estar renovándose y adaptándose constantemente si quieren ser competitivas en un entorno, que como sucede en el deporte de élite, cambia rápidamente. Precisamente por ese motivo, los ex deportistas de élite son buenos adaptándose a nuevos escenarios y desarrollan fácilmente nuevas habilidades.

El ex deportista de élite en la empresa cuenta con cualidades idóneas

Son varias las habilidades que puede aportar el ex deportista de élite en la empresa:

1. Desarrollo, planificación y ejecución de la estrategia

No sólo el ex deportista de élite, en general, los buenos deportistas están habituados a planificar a corto, medio y largo plazo, a corregir cuando es necesario y a ejecutar con disciplina y estoicismo. Esto llevado a la empresa, significa que les permite tener la visión total de un proyecto y saber cómo transformar y adaptar la estrategia en cada momento. Rafael Nadal nos ha enseñado innumerables veces esto, y estoy seguro de que lo seguirá haciendo en el ámbito empresarial.

2. La presión no es un problema

Durante su etapa profesional, los ex deportistas han aprendido a controlar la ansiedad y a trabajar con presión… lo llevan de serie; son tenaces, rara vez se dan por vencidos, por lo que en el trabajo, si un camino no es viable, buscarán otro que lo sea, y a medida que vayan siendo más eficaces, se volverán más eficientes.

Del mismo modo, los deportistas están constantemente evaluando el camino a su meta, lo que les hace ser buenos gestionando el tiempo y priorizando. En una empresa es esencial tener trabajadores con estas dos características.

3. Conocen sus límites

Otra de las cualidades que otorga haber estado en la élite absoluta de sus disciplinas deportivas es que estos ex deportistas se conocen física y mentalmente, y lo explicitan a su equipo, algo imprescindible para competir al máximo nivel.

Este autoconocimiento les hace ser sinceros, no necesitan fingir, no necesitan vanidad ni demostrar (ya han estado en lo más alto, y también han caído muchas veces).

4. Fomentan el trabajo en equipo

Como deportistas de alto rendimiento han experimentado que lo importante es el objetivo grupal, y que llegando a ese objetivo, se alcanzan los individuales. Han aprendido a subsumir sus egos y metas individuales bajo las metas del equipo. Además, han aprendido a escuchar al entrenador y a saber ser dirigidos, por lo que harán lo mismo con sus superiores.

5. Cero distracciones

Los ex deportistas han trabajado en su carrera una disciplina y hábitos tanto en el plano físico como en el mental, lo que les permite adaptarse a múltiples situaciones y evitar las distracciones, no importa el entorno. Esto es una ventaja en las empresas de hoy en día, que exige la máxima eficiencia y eficacia.

6. Embajadores que son medios de comunicación

Su fama les precede, son conocidos. Contar con ellos como embajadores no deja de ser otro atributo destacable si vas a intentar ficharlos…

7. Mejora continua

El éxito es consecuencia del fracaso. No se logran victorias sin tener antes muchas derrotas.

Si alguien tiene mentalidad de mejorar es Michael Jordan… “He fallado más de 9000 tiros en mi carrera. He perdido más de 300 partidos. En 26 ocasiones me confiaron el tiro ganador y fallé. He fallado una y otra y otra vez en mi vida. Y por eso he tenido éxito”.

Todos los ex deportistas han perdido muchas veces y saben lo que cuesta ganar.

Esa es la mentalidad de campeones, tener una meta e ir a por ella, aprovechando al máximo todos los elementos a disposición, no gastando sus energías mentales enfadándose en las situaciones problemáticas, sino transformándolas en su beneficio.

8. Mentalidad de campeón

Jordi Wild preguntaba a Jorge Lorenzo (pentacampeón del mundo de Moto GP) ¿qué hacer para ser campeón? La respuesta es clara “si tu no quieres ser campeón del mundo, y no es tu objetivo, no lo vas a ser. El primer paso es querer ser campeón del mundo”.

Como son ganadores, saben identificar a sus similares fuera del entorno deportivo y ver esa mentalidad en otros. No es casualidad que Pau Gasol, Casillas, Rafa Nadal estén en proyectos empresariales de toda índole. Saben ver el carácter, la perseverancia, la fortaleza etc. de otras personas, y por ende, se suelen rodear y acompañar de talento del bueno cuando se aventuran a emprender. ¿Quién no querría tener ese ojo para detectar y fichar a otros campeones?

Por todas estas cualidades, personalidades de la talla de Rafael Nadal, Mireia Belmonte, Pau Gasol, Sandra Sánchez, Jorge Lorenzo o Fernando Alonso son grandes ex deportistas de élite en una empresa, o proyecto… los suyos o los de terceros.

Convencer a estos talentos para formar parte de una empresa no es nada fácil, eso si, se puede conseguir, las televisiones han sabido hacerlo con algunos de ellos.

¿Quién no querría tener a uno de estos ex deportistas de élite en la empresa?